En esta familia, la madre, el padre, Guille, Vera, Lúa -el perro- y Minino -el gato- ven cada uno las cosas a su manera. Y es que no siempre existe de manera absoluta lo que es bueno, malo, útil o inútil, sino que mucho depende del punto de vista, de las circunstancias y del contexto.
Gracias a una forma troquelada presente en cada página, este libro nos propone un juego de perspectiva y nos invita a ponernos en el lugar de los otros. Al leer sus páginas, acompañaremos esta familia a lo largo del día hasta llegar al final del libro, donde el lector podrá resolver un pequeño enigma narrativo.
Un libro para aprender a pensar de una manera lúdica.