El desbordamiento de los límites ecológicos del planeta reclama una urgente y profunda transformación del actual modelo económico para caminar hacia una economía circular y sostenible, conscientemente respetuosa de esos límites.
Como economistas, debemos superar el corsé del discurso convencional aportando diagnósticos rigurosos de las causas de los problemas acumulados y proponer las transformaciones necesarias en las instituciones, las reglas de juego, los mercados, los modelos de negocio, las pautas de consumo y las políticas e instrumentos económicos para impulsar un cambio sistémico que ha de ser justo ambiental, territorial y socialmente.
El objetivo es contribuir al debate en la academia y a la formación de nuevas generaciones de estudiantes, así como nutrir de ideas a las instituciones y los movimientos sociales, que son, todos ellos, actores necesarios del cambio hacia una economía realmente sostenible.