«Yo me muero casi todos los días. Todo el mundo está hablando de mi muerte.» Eso dijo Fidel Castro el jueves 20 de julio de 2006 en la ciudad de Córdoba, Argentina, a la que había viajado para asistir a la cumbre de Mercosur. Un día como ése, pero medio siglo atrás, sus compañeros de causa lo alertaban para que fuera más precavido, ya que trascendió que se preparaba un atentado contra su persona. Ésta es la historia de cincuenta años en la mira del asesino.