Desde Jaime Gil de Biedma al pop de los años 2000, una novela sobre la búsqueda de la identidad
Tras quedarse sin trabajo, sin dinero y con el corazón roto, un joven de 26 años decide abandonar Madrid y buscar refugio en su Segovia natal, de la que siempre había tratado de huir. Obligado a convivir con su padre, dedica su tiempo a lamerse las heridas de un fracaso laboral y amoroso que es también un fracaso generacional. Un día se encuentra a un misterioso personaje que dice ser poeta. Pronto descubrirá que no es otro que Jaime Gil de Biedma, cuyas cenizas reposan en el camposanto desde hace más de 30 años.
Es así como la realidad y la literatura, la vida y los referentes, se entrecruzan para hablar de la importancia de las huellas que otros dejaron antes que nosotros en el camino. Guiado por la figura de Jaime Gil de Biedma y por la de otros muchos fantasmas literarios que impregnan nuestra realidad, pero también por sus propios recuerdos, el joven tendrá que enfrentarse a sus contradicciones, que pasan por la manera de relacionarse con su identidad sexual, de aceptar un amor que sigue doliendo o de reconciliarse con un paisaje, con una Castilla olvidada, donde palpita una vida y una belleza desbordantes. Solo así podrá entender que no es tan diferente.